sábado, 16 de diciembre de 2023

La caída de la República

 

I. La República de Bolivia

 

Estamos a menos de dos años de cumplirse los 200 años de la fundación de la República de Bolivia, que ya no es República sino Estado Plurinacional. El 22 de enero de 2010, el entonces presidente de la república Evo Morales, le cambió el nombre de república por el de estado plurinacional. La caída de la República comenzó en octubre de 2003, cuando se produjo una revuelta, que derrocó al gobierno democrático de Gonzalo Sánchez de Lozada. Entre los años 1825 y 2003, la república se vio envuelta en dos guerras: la del Pacífico y la del Chaco, que fueron dos hitos que produjeron profundos cambios en el país, sobre todo en su sistema político institucional. En la guerra del Pacífico perdimos el Litoral y en la guerra del Chaco, aunque la perdida territorial no fue significativa para el país, se manifestaron las serias deficiencias que tenía Bolivia como estado.

De 1825 a 1880 Bolivia estuvo gobernada, en la mayor parte del tiempo, por caudillos avocados a ejercer el poder y disfrutar de sus prebendas, sin preocuparse por organizar a la república y de crear instituciones sobre las cuales construir un país. La consecuencia fue la pérdida del departamento del Litoral. Después de la derrota en la batalla de Tacna, recién se comenzó a tener gobiernos para que trabajaran en el desarrollo político, económico y social del país.

De 1880 a 1920 los gobiernos fueron elegidos mediante elecciones, restringidas a una parte pequeña de la población, pero mejor que el esquema de golpes de estado de los caudillos. En este periodo gobernaron primero los conservadores y luego los liberales. Se desarrollaron los tres poderes ejecutivo, legislativo y judicial, se construyó la red de ferrocarriles en el altiplano con conexiones a las ciudades de Cochabamba, Sucre y Potosí y se introdujeron otros adelantos que produjo la revolución industrial. Mediante golpe de estado los republicanos tomaron el poder en 1920 y gobernaron hasta 1934.

La guerra del Chaco, que se produjo entre 1931 y 1934, significó la toma de conciencia para un cambio en las estructuras sociales, políticas y económicas del país, que se produjo con la revolución del 9 de abril de 1952. Las principales medidas de la revolución fueron: reforma agraria, nacionalización de las minas, voto universal, reforma educativa, creación de la legislación del trabajo y del sistema de seguridad social, la marcha a Santa Cruz y la construcción de la red de carreteras. El Movimiento Nacionalista Revolucionario, que fue el conductor de la revolución, gobernó desde 1952 a 1964, cuando Víctor Paz fue derrocado por René Barrientos, dando lugar al periodo de gobiernos militares que se extendió hasta 1982.

En el año 1982 se inició el periodo de gobiernos democráticos que se extendió hasta el año 2003. En este periodo hubo alternatividad de gobiernos y un ejercicio adecuado del sistema democrático, en el cual se podía disputar el ejercicio del poder. En el gobierno de la UDP se produjo la crisis económica, que se generó en el gobierno dictatorial de Banzer y se profundizó con las políticas populistas del gobierno. Durante el gobierno del MNR de Víctor Paz se promulgó el decreto supremo 21060, que puso fin a la crisis económica y estableció una nueva política económica basada en el libre mercado. Se transformó la organización del estado y sus instituciones, dando a los departamentos y municipios una función más preponderante.

En el periodo democrático se promulgó la ley SAFCO y se instituyó una Contraloría independiente para control de los gastos del gobierno. Una ley importante fue la ley de Participación Popular. Se reemplazó el sistema de pensiones de reparto por el de ahorro personal. Se creó el Sistema Nacional de Inversión Pública, para establecer un mecanismo de selección de los proyectos de inversión pública. Se fortaleció el sistema judicial con la creación del Tribunal Constitucional, el Consejo de la Judicatura y la Defensoría del Pueblo. Hubo otras leyes, reformas y medidas que fortalecieron al estado. Hubo en este periodo un esfuerzo por institucionalizar al país.

La falla principal durante la República estuvo en que el funcionamiento de las instituciones se basaba en el ejercicio de la política. El poder judicial no era totalmente independiente del ejecutivo, pero administraba justicia y los jueces en su mayoría cumplían su función. El poder legislativo, por encima de realizar su función fiscalizadora y de promulgar leyes, su función principal era la de proveer gobernabilidad al gobierno de turno.

Históricamente se han considerado a las instituciones del gobierno, de las gobernaciones y de los municipios, como fuentes de trabajo para los militantes del partido o de los partidos en función de gobierno. Cuando éstas, deberían tener funcionarios de carrera que permanezcan en todos los gobiernos, de manera que se pueda aplicar políticas a largo plazo, diseñadas por profesionales competentes y se pueda tomar buenas decisiones sobre el manejo del país. En 178 años no se pudieron crear instituciones que dirijan el desarrollo político, social y económico del país, éstas estaban comenzando a crearse durante el periodo democrático que duró entre 1982 y 2003, pero este proceso fue interrumpido por la revuelta de octubre de 2003.

 

II. Un golpe a la República

 

Durante el gobierno democrático de Hugo Banzer, se produjeron los primeros movimientos que comenzaron a cuestionar al estado democrático de la república. En Cochabamba en abril del año 2000, se produjo una paralización de actividades por varios días, en protesta por una subida de las tarifas del agua. Simultáneamente, en La Paz los policías del Grupo Especial de Seguridad, cuyo cuartel se encuentra a media cuadra de la plaza Murillo, se amotinaron pidiendo aumento de salarios, incitados por el ex mayor David Vargas.

En el mes de septiembre, la CSUTCB en La Paz y los sindicatos de cocaleros en Chapare, realizaron bloqueos en la carretera que une a las ciudades de La Paz/El Alto, Oruro, Cochabamba y Santa Cruz, ocasionando la paralización, por tres semanas, de las actividades económicas en estas ciudades, produciendo desabastecimiento, pérdidas económicas y perjuicios a las exportaciones. Los cocaleros pedían que se detuviese la erradicación de la coca y la CSUTCB presentó un largo pliego de peticiones. El Secretario Ejecutivo de la CSUTCB era Felipe Quispe. En estos movimientos se manifestaron dos personajes claves, que jugarían un papel fundamental en la caída de la República, Evo Morales líder de los cocaleros del Chapare y Felipe Quispe, líder de los campesinos aimaras de La Paz, los cuales protagonizaron movilizaciones, bloqueos y otras acciones violentas para combatir al gobierno republicano.

En agosto de 2002 asumió la presidencia Gonzalo Sánchez de Lozada. Desde el comienzo de su mandato tuvo que enfrentar bloqueos, marchas y otras acciones contrarias a su gobierno, en particular promovidas por Evo Morales y Felipe Quispe. El 11 de febrero de 2003, otra vez el Grupo Especial de Seguridad se amotinó a la cabeza del ex mayor David Vargas, exigiendo mejoras en el salario y en la logística. La misión de este regimiento es de proveer seguridad al Presidente y a los funcionarios que trabajan en el palacio de gobierno, por lo que éste quedó protegido solo por la guardia militar de los Colorados. El 12 de febrero, una manifestación trotskista de maestros entró en la plaza Murillo, culminando con la apedreadora del edificio del palacio de gobierno, por parte de estudiantes del colegio Ayacucho. La guardia de palacio lanzó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, lo que a su vez fue respondido por los policías amotinados con gases lanzados contra el palacio. Finalmente se desató un enfrentamiento con armas de fuego entre los policías reforzados por efectivos de otras unidades policiales y los militares del palacio reforzados por la policía militar, que produjo la muerte de 9 policías, 4 militares y tres civiles.

El 13 de septiembre Felipe Quispe, en protesta porque que se encarceló a un dirigente aimara, por haber participado en el linchamiento de dos presuntos ladrones de ganado, bloqueó las salidas de La Paz a Oruro y al Perú. En El Alto se realizó un paro protestando contra nuevos impuestos decretados por el Gobierno Municipal de José Luis Paredes. Los cocaleros de Yungas bloquearon la carretera a Yungas, por reclamos relativos a la coca. El 20 de septiembre, una caravana de turistas bolivianos y extranjeros fueron retenidos por un grupo armado en Warisata. El Gobierno realizó un operativo policial militar que rescató a los turistas, con el resultado de 6 muertos: 4 atacantes, una niña y un policía.

A fines de septiembre, en La Paz y sobre todo en El Alto, la Central Obrera Boliviana (COB) realizó una huelga general junto con jubilados y campesinos. Los estudiantes de la Universidad Pública de El Alto realizaron actos vandálicos.

El 11 de octubre comenzó la revuelta contra el gobierno liderada por Felipe Quispe, exigiendo que no se realizara el proyecto de exportación de gas licuado a los mercados de Estados Unidos y México. El proceso de licuefacción se tenía que realizar en un puerto chileno. La revuelta paralizó las actividades en la ciudad de El Alto. Se organizó un cerco a la ciudad de La Paz, con el propósito de cortarle el suministro de alimentos y combustible. En las dos ciudades se produjeron asaltos a las propiedades públicas y privadas y bandas atemorizaban a los ciudadanos. En El Alto se obligaba a los alteños a participar en los bloqueos. Cuando el gobierno organizó el aprovisionamiento de combustible mediante un convoy de camiones cisterna, éste fue atacado y la respuesta ocasionó 20 muertos, de los más de 60 muertos que se produjeron en la revuelta.

Finalmente se pidió la renuncia del presidente. Un grupo de intelectuales de izquierda, encabezados por la ex defensora del pueblo Ana María Romero, realizó una huelga de hambre apoyando el pedido. El vicepresidente Carlos Mesa retiró su apoyo al presidente. La Sra. Ana María Romero llamó a los comandantes de las Fuerzas Armadas “para que no disparen contra el pueblo”. El 17 de octubre, a las nueve de la noche desde el aeropuerto de Viru Viru, el presidente Gonzalo Sánchez envió por fax al Congreso su carta de renuncia.

El objetivo de estas acciones contra los gobiernos de Banzer y Sánchez de Lozada fueron claramente de destruir al sistema democrático de la república. Felipe Quispe, que no se sentía boliviano, quería restaurar el Collasuyo del Imperio Inca, que subyugó a los aimaras y Evo Morales quería crear otro estado, dominado por los productores de coca del Chapare, donde él sea su mandatario. La CSUTCB y la COB, que más que organizaciones sindicales de campesinos y trabajadores, son organizaciones políticas cuyos dirigentes quieren ganar espacios de poder. El ex mayor David Vargas, al viejo estilo de los golpes de estado, quería iniciar una revuelta para tomar el poder.

 

III. Un caudillo para Bolivia

 

Ante la renuncia del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, el vicepresidente Carlos Mesa Gisbert asumió la Presidencia de la República en la noche del 17 de octubre de 2023. Su gobierno duró hasta el 6 de junio de 2005, en el que tuvo que enfrentar la acción desestabilizadora de grupos liderados por dirigentes sindicales y gremiales. Se produjeron tomas de tierra, de minas y de campos petroleros, marchas, huelgas, paros de transporte y bloqueos de carreteras. En el Chapare se produjeron atentados a las fuerzas de militares y policías, que ocasionaron la muerte de dos militares y dos policías. Un oficial de policía y su esposa embarazada fueron asesinados.

En Marzo de 2005, Evo Morales convocó a un bloqueo nacional de carreteras. Durante tres semanas las ciudades de La Paz y El Alto estuvieron paralizadas, la plaza Murillo estaba tomada por manifestantes agresivos. La situación de convulsión continuó hasta que el presidente Mesa “convencido de que su permanencia en el mando lo obligaba al restablecimiento violento del orden”, renunció a la presidencia de la República el 6 de junio de 2005. El 9 de junio, el Congreso reunido en Sucre aceptó su renuncia. Ante la renuncia a la sucesión de los presidentes de las cámaras de senadores y diputados, el Congreso posesionó como presidente de la República a Eduardo Rodríguez Veltzé, presidente de la Corte Suprema de Justicia.

Siguiendo lo que ordenaba la constitución, el presidente Rodríguez Veltzé convocó a elecciones para elegir al presidente de la República, que ejercería el cargo por un nuevo periodo de gobierno. La convocatoria se hizo también para renovar el Congreso. En las elecciones del 18 de diciembre de 2005, el MAS con su candidato Evo Morales obtuvo el 53,7 % de los votos, el ex presidente Jorge Quiroga (Podemos) el 28,6 %, el empresario Samuel Doria Medina (Unidad Nacional) el 7,8 %, Michiaki Nagatani (MNR) el 6,5 % y el líder de la insurrección de octubre de 2023 Felipe Quispe (MIP) el 2,2 %. Evo Morales se posesionó como presidente el 22 de enero de 2006.

Desde 1979, ningún candidato a la presidencia ganaba las elecciones con un porcentaje mayor al 50 %, lo que logró Evo Morales. Posteriormente ganó otras dos elecciones con más del 60 %. Esto fue porque salió a la luz la afición que tienen los bolivianos o una gran parte de ellos por los caudillos. Surgió un nuevo caudillo que se decía representante de los indígenas, lo cual era un gran motivó para que una gran parte de la población boliviana se identificará con él. Era también una esperanza para tener un gobierno de izquierda. A las organizaciones que componían su partido: los sindicatos de cocaleros, CSUTCB, COB, juntas vecinales de El Alto, sindicatos de mineros, se unió mucha gente que veía en el caudillo y su partido la mejor posibilidad de acceder al poder político, el MAS se convirtió en un partido con presencia en todo el país.

El 53,7 % de los electores eligieron más a un caudillo que a un gobierno. No eligieron a Jorge Quiroga, un joven expresidente que ya conocía como era el oficio de gobernar al país y tenía dentro de su partido personas con capacidad para desempeñar las funciones del gobierno. Tampoco a Samuel Doria Medina, un exitoso empresario con experiencia política, que sabía cómo dirigir una organización y podía formar un equipo competente para conformar un gobierno eficiente. En cambio, eligieron a un candidato que con suerte llegó a completar un poco más de la educación primaria, cuyos antecedentes políticos eran solamente de haber sido dirigente de los cocaleros y su carrera política se limitaba a la de haber organizado los bloqueos que debilitaron a la economía y a la gestión de los gobiernos de Banzer y Sánchez de Lozada. No tenía un equipo con personas capacitadas para desempeñar las funciones de gobierno.

Evo Morales estuvo de presidente casi 14 años, su gobierno dominó los tres poderes del estado: ejecutivo, legislativo y judicial y el Tribunal Electoral. De esta manera impuso un gobierno autoritario, prebendalista y corrupto que clausuró una república que empezaba a consolidarse y donde comenzaba a desarrollarse el estado, las instituciones, la democracia y el estado de derecho. Mas que un presidente era un monarca que se dedicaba a gozar de los beneficios colaterales que proporciona el poder. La labor de administración del estado estaba a cargo del vicepresidente y dos o tres ministros claves. Se dedicó a viajar dentro del país y por el exterior. Su labor presidencial consistía en viajar todos los días, para jugar futbol y participar en agasajos que le hacían sus seguidores, cuando no realizaba sus frecuentes viajes al exterior, incluso para ver un partido de futbol. Disponía de avión, helicóptero y vehículo automotor. Se aprovechaba del poder para tener novias adolescentes. El definió las inversiones que hizo su gobierno en elefantes blancos, empresas deficitarias y malos proyectos, que hizo desperdiciar al país, de la mejor oportunidad que tuvo en su historia, para lograr el tan esperado desarrollo económico. Hizo construir una gran cantidad de canchas, coliseos, estadios y promovió otros gastos inútiles, como un museo dedicado a exaltar a su persona. En su gobierno se produjo un enorme despilfarro de los ingentes recursos que ingresaron al país por la subida de los precios internacionales del gas, minerales y otros productos que exporta Bolivia al mercado internacional.

 

IV. El Estado Plurinacional

 

El 22 de enero de 2010, el presidente de la República Evo Morales proclamó la fundación del Estado Plurinacional de Bolivia, en sustitución de la República de Bolivia fundada el 6 de agosto de 1825. El nuevo estado nació como el resultado de la asunción de Evo Morales y fue creado para que éste lo gobierne indefinidamente. Nace también con el apoyo de la mayoría de la población, que ya no quiere el viejo esquema de la República de los pasados 185 años y a sus tradicionales políticos.

El Estado Plurinacional es producto del desorden en el que vivió el país desde octubre de 2003. Se instituyen en el país el bloqueo y la pérdida del principio de autoridad. Los bloqueos en las carreteras y las marchas a y en la ciudad de La Paz, son los instrumentos para lograr la atención a requerimientos particulares de los sectores. Para pedir la construcción de una escuela se bloquea una carretera, sin considerar el perjuicio que se ocasiona a otras personas que están viajando por trabajo, salud o para ganarse el pan de cada día, violando el derecho que tienen de realizar sus actividades. La policía dejó de ejercer el deber que tiene de mantener la libre circulación por el territorio nacional. Rige la ley del más fuerte o de los sectores que tienen más fuerza de presión como los mineros, que han conseguido apoderarse de empresas mineras, pagar impuestos reducidos y obtener leyes que favorezcan a su sector.

Representando los intereses de la región del Chapare, el Estado favoreció el desarrollo del narcotráfico. Esta región se convirtió en un santuario del narcotráfico. El Gobierno aumentó la superficie permitida para el cultivo legal de coca y fomentó el cultivo de la hoja en los parques naturales. El Chapare se convirtió en un centro de abastecimiento de materia prima para Brasil y Argentina. Se sintió la presencia de los carteles internacionales del narcotráfico. La producción de droga se extendió por todo el país. Un funcionario de alto nivel del gobierno de Evo Morales está preso en Estados Unidos, por el delito de narcotráfico y cuatro jefes de la lucha contra el narcotráfico fueron encontrados implicados en el delito de tráfico de cocaína.

En el Estado Plurinacional la justicia fue capturada por el gobierno. Mediante sufragio se nombran a los magistrados de los tres órganos superiores de la justicia, los que son elegidos para servir a los intereses del gobierno. En general, los jueces del sistema judicial tienen que ejercer la justicia dictaminada por el gobierno. De esta manera el Poder Judicial sirvió para que el presidente y los miembros de su partido manejen el gobierno y los recursos del país según su antojo y para que los delitos que cometen los miembros del gobierno no sean penalizados y por el contrario sirve para perseguir a autoridades de gobiernos anteriores y a opositores al gobierno. Por ejemplo, en el caso del Fondo Indígena, donde los recursos fueron a parar a cuentas particulares por proyectos fantasmas, la autoridad que denunció el desfalco fue aprendido y sujeto a varios juicios durante siete años, hasta que falleció por el tratamiento que recibió. La degradación de la justicia se manifestó en la cantidad de jueces corruptos que fueron encontrados cometiendo delitos contra la ley.

Otra muestra de cómo fue manipulada la justicia fue el caso del hotel Las Américas, donde tres extranjeros fueron asesinados y otros dos apresados. El presidente Evo Morales denunció a la prensa internacional que se había desbaratado un complot para asesinarlo. Posteriormente el gobierno los acusó, junto a otros ciudadanos cruceños, de montar un grupo armado para organizar un movimiento separatista. El juicio duró diez años y nunca se presentó una prueba, más bien los hechos y las denuncias en contra, demostraron que el caso fue montado por el gobierno.

Con la justicia y el poder político copados, el gobierno de Evo Morales se ocupó de des institucionalizar al país y de convertir a la administración pública en un aparato de corrupción. Anuló los instrumentos que se tenía para controlar y fiscalizar la administración de los recursos del estado como la Ley SAFCO, el Sistema de Administración de Bienes y Servicios, el Sistema Nacional de Inversión Pública y a la institución encargada de hacer cumplir las normas de ellos, que es la Contraloría. De esta manera, los proyectos de inversión pública y los gastos del gobierno se hicieron según la voluntad y el deseo del presidente y los administradores públicos. La bonanza que tuvo el país en los años del gobierno del MAS fue despilfarrada en gastos inútiles, empresas estatales deficitarias, malos proyectos, elefantes blancos y corrupción.

En el Estado Plurinacional se fomentó o se permitió los avallasamientos y tomas de propiedades privadas y fiscales. Estos se produjeron mayormente en el departamento de Santa Cruz, por bandas de avasalladores identificados con el MAS. El gobierno a través del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), la justicia y la policía no ejercieron su deber de hacer respetar las leyes que protegen a la propiedad. En los centros urbanos la propiedad se vio amenazada por los loteadores, lo que originó peleas entre estos y los propietarios legítimos.

Otro actor protagonista en el Estado Plurinacional fue el contrabando que creció de manera alarmante. En las fronteras con Chile y Perú el gobierno tuvo que emplear a las Fuerzas Armadas para reprimir el contrabando, que se realiza en gran escala y donde están comprometidas poblaciones enteras. Otro tanto sucede en las fronteras con Brasil, Paraguay y Argentina En poblaciones del Occidente, se puede comprar vehículos chutos con placas y papeles. En ciudades intermedias, los vehículos circulan con placas ilegales o simplemente sin placas, sin que exista control por las autoridades.

lunes, 6 de marzo de 2023

Simón I. Patiño

 

I. Comienzo de la historia de un gran hombre y una gran mujer

 

Allá por los años 60 del siglo pasado, sabía que la COMIBOL en las minas nacionalizadas de la empresa de Simón I. Patiño tenía hospital, escuelas, viviendas para los trabajadores, pulpería y otras facilidades para los empleados. Me parecía dudoso que estas facilidades habrían sido provistas por la COMIBOL, empecé a pensar que podrían haber sido provistas por Simón I. Patiño. Por otra parte, circulaba la imagen de Simón I. Patiño (y todavía sigue circulando) de que éste llegó a constituir un superestado y junto con la rosca o como parte de ella, oprimía al pueblo boliviano e impedía que Bolivia se desarrolle. Se decía que los mineros trabajaban en sus minas en condiciones penosas y la mayor parte del beneficio que obtenía de la explotación minera era para su propio lucro, dejando muy poco para el país. Se llegó a afirmar que Patiño podía poner al presidente que él quisiera.

Don Roberto Querejazu Calvo ha escrito tres libros fundamentales sobre la historia de Bolivia, uno de ellos es Llallagua, sobre el cerro donde se desarrolló en el siglo XX la minería del estaño. La lectura de este libro me hizo descubrir que todos esos servicios sociales que había en Llallagua, no los había provisto la COMIBOL, sino la empresa que anteriormente explotaba las minas de estaño de ese cerro, cuyo propietario era Simón I. Patiño. También descubrí que las imágenes que existían sobre este boliviano, no eran las que correspondían a la realidad y que habían sido creadas para sustentar un nuevo esquema político para el país. Para contribuir a la verdadera interpretación de la historia, se presenta en este artículo la historia de este boliviano.

Simón Iturri Patiño nació el 1 de junio de 1860 en Santibáñez del departamento de Cochabamba. Sus padres fueron Eugenio Iturri y María Patiño. El prefirió ser conocido por el apellido de su madre. Cuando tenía ocho años se trasladó a la ciudad de Cochabamba, donde hizo sus estudios de primaria y secundaria en el Seminario. Como buen cochabambino hablaba castellano y quechua.

Terminados sus estudios de bachillerato se trasladó a la ciudad de Oruro, donde tuvo su primer empleo, de vendedor en un pequeño negocio de importaciones. De Oruro se trasladó a Huanchaca, donde obtuvo un modesto puesto en la sección administrativa de la Compañía Huanchaca. Regresó a Cochabamba por un corto tiempo y volvió a Oruro, donde consiguió empleo en la firma comercial Hermann Fricke y Compañía, que importaba mercadería de ultramar y exportaba minerales comprados a mineros pequeños y también corteza de quina y goma natural.

En la catedral de Oruro, el 1 de mayo de 1889 Patiño contrajo matrimonio con Albina Rodríguez Ocampo de 16 años, él tenía 29 años. Albina pertenecía a una notable familia orureña. Tuvieron siete hijos, dos murieron en la infancia, René, Antenor, Graciela, Elena y Luz Mila.

Patiño trabajando en la firma Fricke conoció al minero Sergio Oporto que venía a vender minerales. Le propuso formar una sociedad para explotar la mina de Oporto, la cual fue formalizada el 26 de agosto de 1895 con el nombre de “Patiño – Oporto. Mina La Salvadora”. Patiño aportó a la sociedad con sus ahorros de 5.000 Bs. La concesión tenía un problema legal con Juan Artigue, que reclamaba la propiedad de la mina.

Oporto estaba en la mina y Patiño en Oruro, vendiendo los minerales y enviando insumos para la explotación, dando instrucciones y haciendo reclamos para obtener resultados de la explotación de la mina. Pero estos no venían, más bien se acumulaban las deudas, al extremo que Oporto quería vender la mina. Patiño propuso a Oporto comprarle su parte, lo que éste aceptó. A los dos años de la formación de la sociedad, Patiño junto con su esposa Albina se hicieron dueños del 100 % de la propiedad de la mina, asumiendo las deudas que fueron contraídas con la firma Fricke. Patiño se trasladó a la mina para trabajarla en persona. El campamento se encontraba a 4.400 m sobre el nivel del mar. Al poco tiempo, su joven esposa Albina y sus pequeños niños se reunieron con él para acompañarle y ella colaborarle en el trabajo. Albina había vendido sus alhajas y las propiedades que tenían. Patiño conmovido prometió construirle un palacio, que a la postre cumplió. Cuando se ausentaba de la mina, Albina se quedaba dirigiendo los trabajos en la mina.

 

II. Construcción de un imperio

 

Patiño organizó los trabajos en la mina con las muchas dificultades de tipo financiero que tenía. Los minerales que extraía eran de baja ley y su venta no cubría los costos de producción. Los 10.000 Bs. que trajo su esposa Albina, permitieron que pueda continuar con la explotación de la mina.

Pasaba mucho tiempo dentro de la mina escudriñando la estructura de la roca y señalando los lugares donde los mineros debían hacer las perforaciones. En cierta ocasión indicó que se haga una perforación en una roca que contenía pirita, contra la opinión de su capataz Menéndez, un experimentado minero. Como resultado de esta perforación, llegó el día en que los mineros salieron de la mina con pedazos de roca que contenían un mineral blanco, que ellos creían era plata. Simón y Albina fueron vitoreados. Patiño llevo muestras de las rocas a un laboratorio en Huanuni, rogando que no fuera plata, que sea estaño. El laboratorio confirmo que las muestras contenían estaño en concentraciones significativas del 47 al 58 %. En el mundo estaba comenzando el ciclo de los metales industriales, entre los cuales estaba el estaño.

La concentración de estaño era tan grande que los minerales solo necesitaban ser molidos. La situación de Patiño cambió radicalmente, pudo pagar las deudas que tenía a la firma Fricke, que se había comportado comprensivamente con él y comenzar una explotación con beneficio. Pero también surgió el peligro de que el litigante Juan Artigue, que creía que la concesión que tenía llegaba a La Salvadora, decidió tomar la mina por la fuerza. Organizó una fuerza armada de 60 hombres bien armados y se dispuso a tomar la mina. Patiño organizó la defensa con sus trabajadores, contando con unos cuantos rifles. Demostrando firmeza y haciendo creer a los atacantes que disponía de una fuerza considerable, los atacantes se dispersaron.

Con el descubrimiento de la veta, Patiño organizó una empresa minera de alta eficiencia, optimizando los métodos de producción y de transporte. Hizo traer un ingenio de Alemania e instaló un andarivel para el transporte de minerales de la mina al ingenio. Recurrió al financiamiento de los bancos para adquirir estos componentes y otros más para el mejor desempeño de la producción. Se trasladó a Oruro para atender la administración general de la empresa y para atender los múltiples litigios que tenía con sus vecinos Sainz y Minchin y con Artigue. Para la administración en la mina contrató gerentes, pero él estaba vigilando permanentemente el desempeño de la mina, incluyendo la revisión de los estados financieros, para control de los resultados y de los costos de producción.

Con La Salvadora consolidada y en crecimiento, Patiño emprendió la ampliación de la empresa minera. Comenzó comprando las concesiones de sus vecinos “Bebin Hermanos” y la mina e ingenio de John B. Minchin. También adquirió las minas de “Penny, Duncan y Harrison” y otras existentes en el cerro Pozoconi de Huanuni. En 1906 fundó el Banco Mercantil. En Cochabamba, organizó la Compañía de Luz y Fuerza Eléctrica proveyendo gran parte del capital de inversión. Para entonces los esposos Patiño eran los más ricos de Bolivia. En 1909 viajó a Hamburgo para abrir una oficina para que le sirviese de agencia de ventas y para la adquisición de maquinaria para sus minas.

Para cumplir la promesa que le hizo a su esposa Albina, Patiño hizo construir el palacio de Portales y la villa de Pairumani. En 1912, la familia Patiño se trasladó a Europa. Estuvieron primero en Hamburgo, Alemania, después en Paris, Francia, de donde hacía viajes a Londres. El propósito de Patiño era de consolidar su oficina en Hamburgo, tomar contacto con los compradores de sus minerales, conocer el negocio de las fundiciones e investigar la posibilidad de hacer inversiones. Compró acciones de fundiciones en Europa y de compañías malayas productoras de estaño. Entre 1912 y 1921 hizo construir el ferrocarril Machacamarca – Uncía. Patiño utilizando dos empresas británicas y una norteamericana, entre 1914 y 1924 adquirió la “Compañía Estañífera de Llallagua”, comprando sus acciones en la Bolsa de Santiago. Esta era la empresa de capitales chilenos, que explotaba estaño en el cerro de Llallagua. En julio de 1924, registró en estado Delaware (EEUU) la compañía “Patiño Mines and Enterprises Consolidated (Incorporated)”, constituida por los activos del ferrocarril Machacamarca – Uncía, La Salvadora y la Compañía Estañífera Llallagua. En 1939, cuando comenzaba la Segunda Guerra Mundial, los esposos Patiño se trasladaron a Nueva York.

Para 1924, los esposos Patiño eran dueños de un imperio financiero, que fue construido por el esfuerzo y la consagración al trabajo de Simón I. Patiño y el apoyo de su esposa Albina. Patiño tenía una buena educación, adquirida en el Seminario de Cochabamba, un talento extraordinario para los negocios y una dedicación entregada al trabajo, con lo que construyó este imperio.

 

III Simón I. Patiño y Bolivia

 

En la primera mitad del siglo XX, Bolivia era el segundo productor de estaño en el mundo y su economía dependía de la minería y principalmente de este producto. El principal productor era Simón I. Patiño y después estaban Hochschild y Aramayo, pero también estaban los mineros de las minerías mediana y pequeña. Cuando bajaban los precios del estaño y los otros minerales, sufría la economía boliviana. El Gobierno tenía como principal fuente de ingreso para poder funcionar, los impuestos que pagaban los mineros. Había empresas ferroviarias y otras y la industria estaba comenzando a desarrollarse. Habría que ver si los terratenientes de la Rosca pagaban impuestos.

Patiño vivía concentrado en el manejo de sus empresas, cuidando los mínimos detalles para que den los mejores resultados y dedicado a su familia. No tenía tiempo para intervenir en la política. Los presidentes le tenían respeto, así en el gobierno de Bautista Saavedra fue llamado para mediar entre políticos oficialistas y opositores para que trabajen juntos por el bien del país, lo que no pudo lograr. El presidente Germán Busch se comunicó con él para reunir criterios para llevar al país por las sendas del progreso.

Los precios del estaño variaban mucho en el mercado internacional, lo cual afectaba mucho a la minería boliviana, ya que tenía costos de producción mayores que los de sus competidores, Para controlar los precios del estaño se organizó el Comité Internacional del Estaño (CIE) en el que Patiño fue uno de los organizadores y desempeñó una función importante en favor del país. El presidente Germán Busch le mandó una nota de agradecimiento por los esfuerzos que hacía Patiño en el CIE “en defensa de nuestra principal industria”.

El hospital (que era el mejor de Bolivia), las escuelas y las viviendas que tenía la COMIBOL fueron construidas por la empresa de Patiño. La pulpería, también fue creada por Patiño. Los primeros bolivianos que tuvieron beneficios sociales fueron los trabajadores de las minas de Patiño. Tenían las ocho horas diarias de trabajo de lunes a sábado, salario y sueldo sujeto a contrato, bonos de producción y primas, pagos por sobretiempo, licencias, indemnización, desahucio y comenzaron a tener las mutuales de ahorro. Para Patiño era muy importante que sus trabajadores tuvieran las mejores condiciones de trabajo.

En Pairumani, Patiño estableció una hacienda modelo de agricultura y ganadería, a donde hizo traer animales importados de EEUU, Europa, Chile y Canadá. La hacienda disponía de un establecimiento de producción de lácteos con refrigeración y pasteurización, molino, sección de almácigos y cultivos de especies vegetales e incluso una panadería. Inició la industria del vino y del singani a través de la empresa SAGIC.

Patiño propuso tres proyectos para el desarrollo del país. El ferrocarril Machacamarca – Uncía, que fue construido con sus recursos, la navegación del río Desaguadero, que felizmente no se concretó y el ferrocarril Cochabamba – Chimoré, que el Congreso Nacional rechazó. Para este último tenía el proyecto realizado y disponía de los recursos financieros necesarios para su construcción. Si se hubiera construido, se hubiera iniciado el desarrollo del Chapare y la apertura de Santa Cruz se hubiera concretado mucho antes, porque la construcción de un ferrocarril entre Chimoré y Santa Cruz hubiera sido fácil de construir, siguiendo terreno plano.

Para el financiamiento de la guerra del Chaco el gobierno de Salamanca recurrió a la minería. Obligó a las empresas mineras a entregar las divisas al Gobierno, para después venderlas a precios más altos que los que pagaba. El Gobierno elevó los impuestos sobre ventas y renta personal y creó “impuestos especiales de emergencia” que las empresas mineras fueron las que más pagaron. Pero el agente más importante para financiar las urgentes necesidades que exigía la guerra fue Simón I. Patiño.

El gobierno de Salamanca obtuvo de Patiño créditos por 6.740.000 $US sin plazo, sin garantías y sin intereses. El presidente le llamaba continuamente pidiéndole que le ayude a solucionar problemas que se presentaban en el Chaco. Patiño actuó de intermediario y garante para que el Gobierno obtenga créditos de la banca internacional y se hizo cargo de la compra de material de guerra en Europa, haciendo gestiones especiales para que estos lleguen lo más antes posible a Bolivia. Donó dos aviones de transporte Junkers J.B.52. Su esposa Albina hizo donación de 50.000 Bs. para la Cruz Roja y donaciones de drogas, camas, uniformes, barriles para agua y 25.000 sacos de arena.

Al presente los minerales se han convertido en el principal rubro de exportación de Bolivia, gracias a las empresas internacionales y a las cooperativas mineras asociadas con empresas chinas. De ahí que el futuro de la minería está en empresas que usan tecnología moderna con uso intensivo de maquinaria, como la que creó en su tiempo Simón I. Patiño.